En el marco de la dictadura militar que se encontraba gobernando, se sucedieron una serie de cortes en el suministro de energía eléctrica en Libertador General San Martín y Calilegua, así como en otras localidades de la Provincia de Jujuy, durante una semana, comenzando el día 20 de julio. Con estos apagones, que buscaban imponer el terror en la población, sobrevinieron detenciones clandestinas y secuestros propiamentedichos, llevados a cabo por los militares y con colaboración de las fuerzas de la policía, tanto provinciales como federales que sitiaron la zona.

Cuentan también que los recursos para transportar personas y demás herramientas para consumar el hecho, fueron provistos por directivos de la empresa Ledesma. Toda esta maquinaria dejó un saldo de unas 400 personas secuestradas, llevadas a centros clandestinos de detención, donde luego de permanecer secuestrados por días y meses, muchos jamás recuperarían su libertad con vida, y es aún hoy que se continúa con la búsqueda de ellos, tanto allí en Jujuy como en el resto del país.