El presidente electo Raúl Alfonsín recibe a Madres de Plaza de Mayo, encabezadas por la señora Hebe de Bonafini, en lo que sería una reunión, la segunda, llevada a cabo semanas antes de que el mandatario asumiera a su cargo de Presidente de la Nación, ya que días atrás se había acercado con temáticas de la misma índole con miembros de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos y el mismísimo Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, pero esta vez las proclamas de Madres de Plaza de Mayo era puntualmente poner un plazo de 48 horas luego del 10 de diciembre que ausmiría Alfonsín, para la liberación de todos los detenidos clandestinamente y desaparecidos, además de proponer se desarrollen en un futuro cercano los juicios por jurados a los represores y miembros de las juntas militares, constituyendo esta reunión en un hecho histórico ya que era el presidente electo Raúl Alfonsín el primer mandatario democrático que recibía a las Madres de Plaza de Mayo.