Se firma el Pacto Federal o Liga del Litoral entre las provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos, al que adhieren después las restantes provincias. Crean una comisión permanente que debía convocar un Congreso General Federativo que arregle la administración general del país bajo el Sistema Federal.
Los objetivos del mismo eran invitando previamente a las demás provincias, poder centralizar la política en Buenos Aires, así como también la actividad aduanera, segundo poder defenderse de ataques internos o externos y como eje final formar un estado autónomo y poder aplicar así un fuerte proteccionismo económico.